miércoles, 16 de junio de 2010

Abrazar al marxismo

La gracieta socialista del día, o de la semana, es la que ha hecho De la Vega, a raíz del chiste (éste sí, con mucha gracia) de Dolores de Cospedal, el de que el PP es el partido de los trabajadores (luego, a lo lejos, he escuchado tonterías en TeleMadrid del estilo de "es que trabajadores somos todos, por qué no va a ser el PP nuestro partido"). De la Vega dice, entonces, que éstos van a la deriva, expresión que en los últimos años ha pasado a ser de las más utilizadas para decir cualquier cosa, y que a este paso van a acabar abrazando el Marxismo-Leninismo. Pasaremos por alto la burda conexión marxismo-leninismo. Centrémonos en lo gordo.

La portavoz del Gobierno se chotea del partido que les va a ganar las próximas elecciones gracias al voto de los trabajadores cabreados. Tienen ya programada para septiembre una irrisoria huelga general que, aunque sea de refilón, demuestra que no están haciendo las cosas bien respecto a los trabajadores, pero tienen tiempo los socialistas de reírse (carcajadas variadas en la Cámara Baja cuando la vicepresidenta dijo aquello) de la oposición, que cada día es más populista y más penosa, pero es que el populismo vende en España.
Ayer en Buenafuente, aunque en clave de comedia, uno de los humoristas del programa, acerca de esto, dijo "a mí no me parece mal que el PP sea el partido de los trabajadores, después de todo, alguien tiene que llenar el vacío que ha dejado el PSOE". Pues eso no es cosa de risa: al PSOE se le han acabado los campos de batalla (aborto, matrimonio homosexual) en los que arrinconar al PP hasta la derecha más extrema, y es que además han descuidado su rincón, se han ido tan al centro (venga, concedámosles el centro) que es hasta creíble que un partido derechoso pueda hacerse ahora cargo de los obreros desamparados. Y eso al PSOE no le importa, ya se le ha olvidado. Deberían estar sudando la gota gorda para que tal afirmación de De Cospedal fuese una barbaridad, hasta para los idiotas de TeleMadrid.

¿Y mientras tanto? Hoy a las 16:00 primer partido de la selección. La Roja, por cierto.

viernes, 11 de junio de 2010

De buena ley

Este programa, creo que de Teta5 (va siendo hora de retomar viejos juegos de palabras), es mucho más interesante de lo que a primera vista pueda parecer. Os cuento la trama (como en narrativa): las partes de un conflicto, generalmente de tipo civil o mercantil, quieren que un árbitro (como un juez pero que eligen ellos mismos de común acuerdo) resuelva el caso y van a la tele para hacerlo. Las partes exponen sus motivos, y cuando el árbitro se retira a pensar un rato y a echar una meada, el público debate el asunto.
Todos actores. Pues seguramente, pero aun así tiene algo de interés todo esto:
Primero, porque acerca el Derecho a la plebe, hace que no parezca de otro mundo, ni siquiera demasiado complicado, y puede que incluso fomente el que algunos curiosos se informen de las materias que se tocan.
Segundo, porque deja claro la poca idea que tiene la gente, en general, sobre el Derecho: normalmente se ponen a discutir asuntos que nada tienen que ver con lo importante del asunto. Algunas opiniones son tan alarmantemente absurdas que sólo se me ocurre llegar a la conclusión de que, efectivamente, son todos actores.
Y por último, y no por ello menor, porque se ve qué es lo que a la gente le gusta: el barullo, las opiniones sin reflexión, las emociones a flor de piel y las descalificaciones. Es decir, el programa "De buena ley" es como una Noria de sobremesa. Y todos son actores, hacen lo que el público espera de ellos.



miércoles, 9 de junio de 2010

Los medios de comunicación

No voy a extenderme y no voy a dedicarle más que la memoria a este ejercicio crítico. Ayer El País tildó de fracaso la huelga de funcionarios, y para Público el Gobierno trató de minimizar los datos. Los sindicatos calcularon un 75% de movilización y el Gobierno y sus medios, un 11% (y, por supuesto, no sé quién dice la verdad o quién pretende acercarse verdaderamente a ella). Para Rubalcaba (como cuenta Rafa Reig en su blog) los ETArras no hacen otra cosa que no sea delinquir, no descansan ni para comer, y para el GARA son "ciudadanos", "personas", o simplemente "imputados".
Me ha tocado ver una noticia en los periódicos y haberla vivido en directo, así que ya sé que de lo que se cuenta hay que creer la mitad. A falta de saber qué mitad creer, y como la otra mitad te la cuenta el periódico opuesto y opositor, definitivamente creo que la disidencia es el camino a seguir. La impunidad y el descaro con que los medios mienten, dicen medias verdades o simplemente escogen información es tan sonrojante que a uno no le queda más remedio que mirar a otro lado. No sé, mirar anuncios, leer la mierda del "¿Qué?".
A cualquier persona medianamente sana le dan ganas de matar al tomarse en serio tanta, tanta desfachatez.
Llegados a este punto ni siquiera importa que escriban como recién salidos de la ESO.