martes, 30 de marzo de 2010

Ésta es la clase de personas que velan por nosotros

No voy a meterme en el terreno de las palizas y los pelotazos injustificados de algunas fuerzas de seguridad. Todos sabemos más o menos las abas que se cuecen entre las paredes de cualquier comisaría. Ahora, más bien, pienso en aquellos que conforman estos cuerpos, porque ya se puede intuir que aquellos que ingresan en sus filas no lo son, en su mayoría, vocacionales.
Éste es el individuo X, que formó su ideología a base de no pensar, de tal forma que con quince años se autoproclamaba batasuno, al tiempo que su comportamiento iba por otros caminos (un modélico y pijo donostiarra). Al terminar la ikastola en la que pocas veces le nació hablar en su idioma patrio, se metió a estudiar Derecho, carrera que dejó, según él, por ser muy española y, por tanto, facha. Después, como no sabía qué hacer, se metió a policía municipal, no sin antes confeccionar un currículum en el que decía tener carné de conducir. Claro que no lo tenía. Así que desde entonces apatrulla la ciudad un jurista abortado con sangre supuestamente borroka, dándose piñazos con su coche de policía porque no sabe conducir (de lo que, además, se jacta). Así que es despedido...y readmitido al tiempo, no sé si con o sin carné, pero es readmitido.
Ésta es la clase de individuos que, cuando necesitemos ayuda, harán sonar la sirena de su coche para venir a rescatarnos.

9 comentarios:

shubbaki dijo...

¿Y se llama...?

lamotta dijo...

El protagonista de las memorias de un pobre diablo, escrita por Alex Merino, no sé si te acordarás...

shubbaki dijo...

Pues vamos apañados.

shubbaki dijo...

A propósito, no sabía que se hubiera metido a Derecho, pensaba que Belén era la única...

Anónimo dijo...

el mundo está plagado de indeseables y de ganas de apretar algún botón para sentirnos menos miserables y menos maniatados, llevados por la corriente.. lástima que algunos desaten su frustración metiéndose en una institución supuestamente respetada, que no respetuosa, y se sientan más personas o más útiles con toda esa estructura jerárquica de disciplina y violencia consentida, metiendo en cintura a otros que, me atrevería a decir, cojean del mismo pie...

no estaría demás plantearse qué tipo de gente, de qué clase, con qué estudios y con qué aspiraciones y consumos se mete en el cuerpo... qué les atrae del oficio, además de la patria

ávida de inspiración, pierdo mi tarde..
muak!!

lamotta dijo...

Pues desde luego que no estaría de más. Parece claro que el que tiene oficio o beneficio hace, hoy día, una carrera, o algún fp de provecho, mientras que los que no lo tienen, se meten a delincuentes o, en su defecto, polis.
No es fácil enfrentarse día a día con la delincuencia y no caer en malas tentaciones. Tampoco debe de ser fácil tener unos kilos de costo o maría y no rebajarlo para fumártelo más tarde. El total es lo que cuenta, y tal.
Yo tengo claro que si fuese poli sería corrupto y que cada día donaría uno o dos carros de hostias para la gentuza que se escuda en las leyes para quebrantarlas más a placer. Quizá por eso no soy poli y seré una rock and roll star :P

Y ahora a estudiar y a concentrarse, eh?? Te amo guapa :)

Anónimo dijo...

:)

shubbaki dijo...

Qué débil es la carne...

rostein dijo...

y lo mejor es que apunta más alto y quiere pertenecer al cuerpo de la Policía vasca