viernes, 18 de diciembre de 2009

Ser original

Ayer iba en el metro y tenía al lado una mujer con gafas de pasta de éstas que ahora se venden como churros. Frente a ella, otra con las mismas gafas (distinto motivo). A mi derecha, una señora leyendo uno de los libros de Millenium. De pie, a menos de un metro, otra chica leyendo uno de la trilogía del vampiro emosexual éste, el de Luna Nueva que no recuerdo cómo se llama. Ah, se me olvidaba, enfrente de mí, otra mujer (sí, todo mujeres) leyendo "el lector", ese beseler que fue adaptado al cine fallidamente (salvo que la novela fuese igualmente mierdosa).
En fin, no tengo nada contra la cultura masificada, salvo que me da lástima el poco criterio que la gente tiene, la necesidad de que un cartel o un banner publicitario te digan lo que has de ver, leer o escuchar. Y no olvidemos a todos esos que lo leen porque verdaderamente quieren leerlo.

Esto me venía a la cabeza pocas horas antes de leer, ya en dos medios, que ser el cabeza de lista de los single's más vendidos en Reino Unido va a estar muy reñido estas navidades: no he escuchado a Susan Boyle, ni a cualquiera de los otros cuarenta principales que compiten, pero se ha creado una plataforma mediante facebook, de tintes subversivos y afortunadamente lúcidos, con el propósito de que cualquiera de estas putas mierdas no ganen en navidad. Me explico (y si no, leed el País, que escriben mejor que yo): se han propuesto llevar al número uno de las listas la canción "Killing in the name of" (para los españoles, "la canción de Que me chupes la polla"), de Rage Against The Machine, cuya frase emblemática dice algo así como que no van a entrar al trapo y que nadie nos va a decir qué coño debemos hacer con nuestra cabeza.

Y parece que la cosa está cuajando. Más allá de la anécdota, es fabuloso que haya gente que no esté dispuesta a pasar por el aro y que, aunque sea simbólicamente, trate de hacer frente. Alguien podría decir que hacerse eco de la noticia o participar en la movilización es también muy de oveja, pero me resisto a pensarlo: la única forma de hacer frente a esos hijos de puta es uniéndose (como han tenido que hacer en Cataluña y la ley contra la tauromaquia, que parece que si no tienes 120.000 firmas y varios partidos políticos detrás es imposible llevar a cabo una iniciativa de carácter político).

Este tipo de cosas, sí, hacen que aún conserve alguna esperanza sobre algo...no sé el qué, pero algo.


6 comentarios:

Marcos dijo...

El problema llega cuando el grupo, de dicho vídeo, pertenece a la misma casa discográfica en la que trabaja Simon Cowell, creador de Factor X y por ende, el mito que estas navidades se intentaba tirar abajo.

En resumidas cuentas... la misma casa de una manera u otra está ganando dinero, a sea con Susan Boyle o cualquier apadrinado de Simon Cowell, o con la promoción de quien intenta tirar estos éxitos prefabricados abajo.

En fin.., borreguismo en nuevas formas de expresión.

lamotta dijo...

No, no es ningún problema. Ya digo que es un gesto simbólico.
Saludos

Anónimo dijo...

Para los fundadores del gesto si, para quien repercute finalmente no tanto, Es como si a alguien le coges un billete de 100 euros y se lo cambias de bolsillo, que es lo que ha acabado sucediendo en torno a todo esto. Al menos en relación al creador de Factor X.

-El principito

lamotta dijo...

Lo cual no cambiará lo que yo escrito.

Marcos dijo...

Si cambia en el hecho de que la originalidad no pretende sino ser otro posible movimiento orquestado en un despacho, tras una larga conversación.

Es posible ¿no?. Al fin y al cabo, de casualidad..
...


. hay un pequeño grupo de personas que han acabado ganando incluso más, gracias a esto, que lo que esperaban.

lamotta dijo...

Ah, aquí la navaja de Occam no vale, cierto :D