viernes, 23 de octubre de 2009

La mierdosidad humana no entiende de ideologías

Me parece lícita la asociación que uno (yo mismo) puede hacer entre las bondades y maldades de la gente contemporánea, los rasgos que más o menos distinguen unos colores de otros. Así, los derechosos serán siempre más racistas, un pelín más egoístas, en fin, peores personas. Y los izquierdosos tienen menos prejuicios, reciclan, son ecologistas y antitaurinos.
Pues no.
Que el mundo no es ni blanco ni negro es un hecho que a día de hoy a nadie se le escapa, pero sigue sorprendiendo ver aflorar las miserias más miserables de los seres humanos en los ámbitos más insospechados.
En el bar "Marx Madera", de corte rojillo, la caña te cuesta 2'5€ y el cubata (ron cubano, espero) 5€. Jugar en su mesa de pin-pon costaba 2€/h (y lo que aquí no cuento, que era todavía peor).
Sabina canta a José Tomás.
¿Quién, en el momento de la verdad, ayuda a quien hay que ayudar?

Sólo se me ocurren dos respuestas ante este desolador panorama: o bien no hablamos de izquierdosos de verdad, o que las características humanas, tanto las buenas (la generosidad en las distancias más cortas) como las malas (egoísmo y capitalismo humano a raudales), las tenemos tan adheridas a nosotros como el propio pellejo, y no nos desprenderemos de ellas salvo que la Educación cambie. O quizá ni siquiera así. Nunca es tarde para mejorar, eso seguro.

Yo también quiero cada vez más al perro de Einstein.

7 comentarios:

G. dijo...

Uis, el Marx Madera. Pues hablando de Madrid 2'50 por una caña no me parece tanto, ni tampoco los 5 euros del cubata.

Además, a lo mejor me equivoco, pero ese local pertence a Izquierda Unida y supongo que el dinero que sacan además de usarlo para pagar el sueldo de los camareros, material y mantenimiento lo usarán para sus campañas y actividades políticas (folletos, pegatinas, y todas esas cosas que tienen por allí).

Bechis.

lamotta dijo...

No creo que te equivoques en lo de IU porque hay propaganda para parar un tren, pero una cosa no quita la otra. Cobrar 2'5 por una caña (veníamos de un bar cercano en el que cobraban sólo, aunque no digo que sea lo común ni mucho menos, a un euro).
Todos necesitamos comer, de acuerdo, pero hay beneficios y beneficios, y veo que los que sirven en el Marx Madera son más de lo mismo en materia de seres humanos. Pero, como ya digo, no es una pura cuestión de cuánto cobraban por la caña. Ni era tampoco el tema del post, sólo un ejemplo.
Muxutxus

Marcos dijo...

Debe de cambiar, la educación emocional y aceptar que hay gente racista, por poner un ejemplo. Es parte del universo y parte de nosotros mismos, como seres individuales, salvo que en otros conceptos, otros contextos. Todos, tenemos situaciones en las que nos sentimos invadidos, extraños, amenazados; elegid cualquiera de las variantes por las que se pueda ser psicológica y racionalmente racista.

Soy un cateto que no sabe diferenciar goros modo, más allá de 4 conceptos, la izquierda de la derecha políticamente hablando y sin embargo me percato de las maneras de actuar de unos y otros, que poco o nada tienen que ver con lo bueno o lo malo. Aunque todos hablan en torno a ello.

Solo hace falta ser honestos, ya no con el prójimo sino con uno mismo.

Pero, es curioso que de diferentes lugares me halla llegado en los últimos días, la apreciación de que en un mundo sincero y honesto, reinaría la desdicha. Yo no lo creo, pero lo entiendo.

lamotta dijo...

No he entendido casi nada, pero bueno.
No creo que el racismo "por naturaleza" lo haga a éste más legítimo. Sobre eso alguna vez ya escribí.
Y sobre la desdicha...bueno, es posible, pero es que a lo mejor no todos prefieren la ignorancia. Ahí tienes a todos los filósofos y poetas tristes.

Saludos

Marcos dijo...

legítimo, ma.
(Del lat. legitĭmus).
1. adj. Conforme a las leyes.
2. adj. lícito (‖ justo).
3. adj. Cierto, genuino y verdadero en cualquier línea.
4. f. Der. Porción de la herencia de que el testador no puede disponer libremente, por asignarla la ley a determinados herederos.
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Si bien el racismo por naturaleza, no tiene porque hacerlo más legítimo. Simplemente es. Pero en esencia, más sincero con lo que siente que en segundas intenciones. La definición de legítimo, si bien es concerniente a ideales intelectuales y no emocionales y este puede ser el problema de entendimiento aquí.

Por cierto, no todos prefieren la ignorancia, pero no es inherente al hecho de tristeza sino todo lo contrario. El problema es el flujo masivo de información en nuestro cerebro, De esto hablaba ya en su día "El club de la lucha" información que conocemos y que no nos sirve para ser felices.

Supongo que deberé acabar haciéndome con el libro de inteligencia emocional que en ocasiones he visto por las estanterías de Fnac.

Pero como decía, todo es emocional y no intelectual. Prefiero a alguien que sea por naturaleza racista, que pro propias convicciones intelectuales. Creo que puede haber espacio entre los dos tipos.

lamotta dijo...

Quien te entienda que venga y lo explique.

G. dijo...

Yo tampoco entiendo una mierda xDDDDDDDDDDDDDDDDDDDDD